Duele ver a los cubanos leyendo la prensa y rezando por la salud de su dictador. Enarbolando pancartas al estilo "Lo único que nos gusta de Alemania es la cerveza" que se podían ver en las concentraciones franquistas de los 70. Muy triste. Pero no hay más ciego que el que no quiere ver.
Lo curioso es ver las imágenes de un fidel recuperado, con un chándal (por supuesto DE MARCA... y de las caras). Son las paradojas del sistema comunista cubano: cartas de racionamiento para el pueblo, mientras el marajá viste de Adidas de 20.000 pesetas. Las imágenes no engañan, Fidel está recuperado, pero podría tratarse de fotos de hace meses, ya que adulterar con el Photoshop la portada del periódico no sería demasiado difícil. La capacidad de manipulación de las dictaduras no tiene límites.
Por supuesto, la visita de Chávez no se ha hecho esperar. Nuevamente, también hay reportaje gráfico, en el que se puede ver a un Fidel encamado y realmente débil. Menudo par de demócratas, haciéndose regalos (incluido una especie de consolador que hará las delicias de su nuevo dueño).
Observen en primer lugar las fotos de Fidel en chándal Adidas (vaya publicidad para los alemanes...) y después las de la visita de Chávez:
Esta es especialmente... especialmente cubana:
Y ahora el intercambio de regalos:
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