16 febrero, 2006

Doctores tiene la "Santa Madre Iglesia"

Éste es uno de esos momentos en los que agradezco fervientemente que se refresquen mis sentimientos hacia la Iglesia Católica gracias a sus integrantes.
No entro en la Fe, ni en la espiritualidad, ni en nada de lo relacionado con las creencias de los católicos; pero la Iglesia Católica ha llegado a un punto de no retorno en el que no sabe ni cuál es su sitio, ni en qué condiciones estará en el futuro. Sinceramente, mi opinión es que la Iglesia está viendo como su "parcela de poder" está mermando día a día.
Y es que me repugna la falta de capacidad de respuesta de esta institución ante los demanes de sus "doctores". El último caso, el del catedrático en Teología Gonzalo Gironés (retirado, gracias a Dios) que afirma que "más de una vez" las víctimas de los malos tratos "provocan con su lengua" al hombre de la casa. "el varón, generalmente, no pierde los estribos por dominio, sino por debilidad, no aguanta más y reacciona descargando su fuerza que aplasta a la provocadora". Sí señor. Como Dios manda ¿no?.
Aquí vemos a nuestra Santa Madre Iglesia, haciendo buen uso de la palabra de sus ilustres catedráticos. Al menos esta vez no han dejado a sus creyentes a la altura del betún con sacerdotes pedófilos como sucedió hace un par de semanas.
Son comentarios como estos en revistas parroquiales los que ayudan a la Iglesia a seguir manteniendo su posición en nuestra sociedad.
Es necesario que se pida que en los sermones de las mezquitas esté presente un policía para comprobar si se incita al terrorismo, o que se impute a Imán de Córdoba por propagar entre sus fieles cómo hay que pegar a una mujer para no dejar marcas. Que se diga que las mezquitas tienen una entrada para hombres y otra apartada para mujeres. Es justo criticar esto, pero también sería justo que se revisaran muchos de los anuncios que se emiten en la COPE (por ejemplo, en uno contra el aborto se utilizan lloros de niños y voces infantiles diciendo que "los niños no tienen derecho a nacer", supongo que la empresa de publicidad habrá elegido en un cásting los mejores lloros y las mejores voces para que reflejen mejor "la realidad"). También sería justo que se imputase a gentuza como este señor, que no sólo se conforma con escribir en la publicación parroquial lo que escribió, sino que se está recorriendo con toda la cara del mundo los programas informativos y hasta de crónica social para volver a decir que las mujeres son las verdaderas culpables de que las maltraten. O que álguien hablase de que en el mismo Vigo, en una reunión que se conoce como "Adoración Nocturna", las mujeres tengan que estar separadas de los hombres. Y no estamos hablando de moros, ni de Afganistán. Estamos hablando de Vigo y de gente que podríamos considerar "de a pié", católica apostólica y romana.
Lo lamentable de este asunto es que la Iglesia se sienta satisfecha con la simple emisión de una corrección por parte del Arzobispado de Valencia. El que debería aparecer en conferencia de prensa, poniendo la cara y su imagen de cabeza visible de la Iglesia en España es el Presidente de la Conferencia Episcopal. Todo lo demás, por lo menos a mí, no me basta.

15 febrero, 2006

George Bush y Donald Rumsfeld: la Convención de Ginebra como papél higiénico.

Creo que gentuza como Bush y especialmente Donald Rumsfeld no se merecen que les dedique ni siquiera unas líneas. Pero lo que sí les digo desde aquí que si ésta es la democracia en América... me alegro de no ser americano.
Y también añado... MISERABLES.
Aquí está su "democracia":





Quizá nunca sepamos agradecer verdaderamente lo que significa la libertad de prensa.

13 febrero, 2006

La gran ESPERANZA blanca. "Espe" hace campaña... para las presidenciales.

Esperanza Aguirre está demostrando últimamente una capacidad de oportunismo político que, en mi opinión, la está aupando dentro del PP a niveles con los que nadie en su partido contaba hace un par de años.
Esperanza, fue salvada por los pelos gracias a Tamayo y Sáez cuando su carrera política amenazaba con volver al Senado (su cara de derrota en el balcón de Calle Génova mientras Aznar le levantaba el brazo cuando Simancas ganó las elecciones lo decía todo). Pero ahora está dando pasos de gigante a tal ritmo que el propio Rajoy se ve eclipsado en sus actos públicos. Que Rajoy se cae con un helicóptero, allí está Esperanza, para salir la primera del helicóptero. Que se inaugura la T4 de Barajas... pues ahí está Esperanza para la inauguración y el discurso, pero nunca para las críticas por el mal servicio. Que la Ley contra el Consumo de Tabaco pasa a las Comunidades.... pues ahí está Esperanza para decir que en Madrid a ella no le da la gana hacer lo que "se supone que dice" la Ley, así que su reglamento dirá que se puede fumar en bodas, bautizos y comuniones.
Esperanza es la baza de parte del PP ante un posible fiasco (otro más) de Mariano Rajoy en las próximas elecciones generales. El PP pese a tenerlo todo a su favor, sigue sin recortar un sólo votante de izquierdas y la gente del partido se empieza a poner nerviosa. Su partido es una piña (descontando Cataluña), pero Rajoy no consigue ni un voto más de los que ya tiene.
Eso sí, a mí no me engaña como a los madrileños cuando dijo que reduciría las listas de espera de la sanidad pública y lo único que hizo fue calcular el tiempo desde que se hacen las pruebas pre-diagnósticas y no desde el momento en el que se le dice al paciente que se tiene que operar. Muy inteligente Esperanza... pero fue trampa.

De vuelta a la embajada rusa y a los zares

Hemos recibido la visita del presidente ruso, Vladimir Putin, la pasada semana. Todo un acto en sí... pero también una patética muestra de las ganas de sacar los viejos trajes de gala del armario. A Putin se le ofreció una recepción oficial, una reunión con el Rey, otra con Zapatero y una cena de gala que me pareció una vuelta a la Francia de Luís XIV.
Allí vimos a nuestra alta sociedad vestida con trajes sacados de la paupérrima embajada rusa de Madrid. Una cena de gala a la que sólo le faltó un vals, bailarines cosacos rusos haciendo su tradicional baile "saponoshi" y cuatro diplomáticos con la nariz roja y apestando a vodka (aunque estos últimos seguro que estaban invitados a la cena).
Y es que la política internacional, la diplomacia... cada vez tiene menos sentido. Vivimos en un mundo en el que se pueden hacer reuniones mediante las nuevas tecnologías (y hasta juicios orales) sin tener que asistir a una penosa muestra del espíritu de los zares y los reyes europeos de hace siglos.
La verdad, si Putin hubiese venido a España para esa cena, me hubiese bastado. Pero que este señor venga a España a hablarme de cooperación antiterrorista, lucha contra el tráfico de drogas y las mafias... ME DA LA RISA. Un presidente que se dedica a suprimir medios de comunicación que le critican, al que conocemos por su "destreza" para solucionar actos terroristas en teatros y en colegios repletos de niños, que no ve a Hamas como un grupo terrorista, que no sabe nada de mafias operantes en su país... se queda en eso, en un presidente de vuelta a los tiempos del Zar Alejandro y a los videos de propaganda electoral practicando kárate.
Entre un Boris Yeltsin con la nariz roja, cantando y bailando el "saponoshi" y este hijo de Putin, me quedo con el primero. Al menos Boris no sería capaz de darle al botón rojo.